«Algunos amigos me llaman Piquillín»

Esteban Giampieri es contador público, pero estudió cocina y se puso un bar en Madrid. Vive en España desde 2002, pero siempre tiene presente a sus raíces, su familia y sus amigos.

Esteban Giampieri es un piquillense de 54 años, que vive desde 2002 en Madrid, en donde es uno de los propietarios del Bar Benteveo, junto a otros dos amigos cordobeses. Es hijo del ya desaparecido José «Pepe» Giampieri y de su esposa Olga. «Hermano del medio» entre Alejandra y Mariano.

Esteban se crió entre las góndolas del recordado Supermercado Giampieri, un comercio que cerró en 2011, después de más de 70 años al servicio de la gente: «Tengo recuerdos desde muy pequeño estar detrás de un mostrador enorme. Casi no llegaba a ver a la gente. Trabajé mucho tiempo en el super hasta que me instalé definitivamente en Córdoba. ¡Son muy lindos recuerdos!», dice el protagonista de esta nota.

«A Madrid vine solo por un año y me quedé. Estoy muy a gusto aquí. Tengo mi negocio, muchos amigos y la visita de todos los amigos que tengo allá», comenta.

¿Que es lo que más extrañas de Piquillín? ¿que sentís cada ves que volvés?

¡A mi madre extraño! Yo he salido de Piquillín desde los 13 años. Pero a medida que pasa el tiempo el pueblo adquiere otro significado. Las raíces, tus compañeros, la vida de pueblo.

¿Cuando fue la última vez que estuviste en el pueblo?

En marzo del 2019 fue mi última vez en el pueblo y tengo previsto viajar antes de junio de este año.

Esteban junto a su familia en una de sus últimas visitas a Piquillín, cuando aún estaba su pare, «Pepe».

¿Porque decidiste en su momento, irte a España?

Necesitaba un cambio de profesión. Soy contador público y trabajaba de eso. Estudie un año de cocina y venía a hacer prácticas de cocina, trabajar de eso y conocer. Encontré aquí

más libertad de la que yo me imaginé, y me quedé. Cuando vuelvo siento nostalgia, siento que he perdido un poco de la historia de mi país. La verdad, siento que está dividida y que ya no va a ser la Argentina que dejé.

¿Le contás a tus amigos españoles sobre Piquillín?

Claro que les cuento, saben que soy de un pueblo muy chiquito. De hecho, algunos me llaman Piquillin.

¿Tu bar ofrece menús argentinos?

Sí, empanadas árabes, criollas, caprese, lomitos, choripán, y nuestro menú diario tiene muchos platos argentinos como la polenta, el pastel de carne, chimichurri, etc.

Buscando información sobre el Bar Benteveo, encontramos una nota en La Nación, en la que se habla sobre la historia de este lugar. Ahí descubrimos que uno de los socios de Esteban, es el reconocido actor Alberto Amman, protagonista de la película «Celda 211», y una de las figuras de la serie «Narcos» de Netflix.

¿¡Alberto Amman es tu socio en el bar!?

Sí, nos conocimos cuando llegó a Madrid. Él vino a estudiar actuación, y trabajamos juntos en un bar que alquilaba por esa época. Yo vine con Federico, un amigazo de Córdoba, y entre los tres nos pusimos el Benteveo. Somos muy amigos los tres, aquí se transforman en familia.

Esteban se muestra «encantado» de ser entrevistado por El Piquillense, y comenta que sigue al medio en redes sociales: «Siempre leo vuestras noticias, y que más de una vez, le mando a la `Olga´, capturas de pantalla con los cortes de luz programados o noticias relevantes de la zona».

¿Algo más que te gustaría contar?

Que siempre es bueno ver caras conocidas, que cuando vengan a Madrid no dejen de visitarme. Les dejo la dirección del bar: calle Santa Isabel 15 Madrid, muy cerca del Museo Reyna Sofía, lugar que hay que visitar. Y que según dicen, los lomitos del Benteveo ¡son mejores que muchos de los de Córdoba!

Esteban en el Benteveo, su bar multipremiado en España.