En su primer discurso como intendente, el abogado recordó a sus «viejos», los que con «sus valores y enseñanzas constituyen las bases que marcan mis trayectos». «Estamos convencidos que sólo desde la articulación entre los sectores público y privado podremos avanzar sobre el desarrollo sostenible y el progreso económico y social de Piquillín», analizó sobre la gestión que se viene.
Tras haber jurado como nuevo intendente de Piquillín, el abogado David Moreno dio su primer discurso como primer mandatario diciendo: «Es un honor para mí estar hoy junto a ustedes, como ciudadano y como intendente recientemente electo por la voluntad popular».
A continuación el flamante jefe municipal agradeció «a quienes depositaron su confianza y esperanza». «Las recibo con gran orgullo y responsabilidad».
Moreno también tuvo palabras de agradecimiento hacia su «compañera de vida Carla y a mis hijas, a mi familia, a mis hermanos, a mis amigos, quienes han sido un apoyo incondicional en este camino». «Su sacrificio y acompañamiento inclaudicables fueron fundamentales para poder luchar por mis convicciones y deseos de construcción colectiva», remarcó.
«No quiero dejar de agradecer a quienes nos eligieron a través del voto y también a aquellos que no lo hicieron, pero hoy están aquí», agregó.
«Quiero agradecer y felicitar a quienes trabajarán activa y comprometidamente en esta gestión por el bien común de nuestra localidad. Con el amor que sentimos por Piquillín, confío en que llevaremos a los hechos las palabras y deseos que nos condujeron hasta aquí», sumó.
Párrafo aparte para el momento en que el intendente recordó a sus «viejos» a quienes reconoció que los lleva diariamente en sus pensamientos y en su corazón. «Sus valores y enseñanzas constituyen las bases que marcan mis trayectos».
Posteriormente citó un fragmento de una canción de Las Pastillas del Abuelo que dice: «Bien parado o en la lona, hay que ser buena persona; dice aquel que a mí me guía noche a noche y día a día”.
Moreno destacó especialmente a su fecha de asunción (10 de diciembre), por ser «doblemente especial». «Conmemoramos los 40 años de democracia en nuestro país, a la que debemos comprometernos para fortalecer día a día. Y recordamos al primer intendente de nuestro pueblo electo en democracia, Carlos Arnoldo ‘Chocho’ Strumia», recordó.
Tras los agradecimientos y recuerdos, el intendente habló del presente y anticipó una época de «desafíos difíciles que inevitablemente demandarán unidad, determinación y esfuerzo por parte de cada uno de nosotros». «La entrega, la creatividad y la responsabilidad de nuestro equipo de gestión será imprescindible para enfrentarnos a la realidad que nos convoca», amplió.
«Estamos convencidos que sólo desde la articulación entre los sectores público y privado podremos avanzar sobre el desarrollo sostenible y el progreso económico y social de Piquillín. Un pueblo que tiene todo el potencial para crecer y desarrollarse», analizó.
«El sector público, representando los intereses colectivos de la sociedad, tiene la responsabilidad de proporcionar un marco regulatorio sólido, servicios públicos de calidad y un entorno propicio para el bienestar general. Y el sector privado, con su capacidad para la innovación, la eficiencia y la inversión, deberá tener un papel fundamental en el crecimiento económico de nuestro pueblo«, añadió.
«Sabemos que hay mucho trabajo por delante, pero confiamos en que, a través de la colaboración y el esfuerzo conjunto, construiremos un presente y un futuro en el que todos los habitantes de Piquillín estén incluidos», manifestó.
«Sigamos trabajando juntos para hacer de nuestro hermoso pueblo un lugar próspero; un hogar donde cada uno de nosotros pueda sentirse parte activa y protagónica de la comunidad en la que convivimos», cerró – entre aplausos- su discurso.