La sede de Piquillín llevará de ahora en más, el nombre de quien cumplió diferentes funciones en el Concejo de Administración.
El miércoles 14 de abril pasado se realizó en Piquillín un acto en homenaje al desaparecido Consejero de la Cooperativa de Electricidad de Monte Cristo; Miguel Isaac Grenón.
Dicha reunión se llevó a cabo en las oficinas ubicadas en calle Velez Sarfield 40, y estuvieron presentes el señor presidente del Consejo de Administración, Eduardo Digón; el Tesorero Ramón Argüello con su esposa Myriam Ponce; los consejeros: Walter Molina, Jacinto Giralt, Nelson Bulchi, Hernán Parodi, Ignacio Moyano; el síndico Sergio Catube con su esposa Perla Rusalén; la Sra. Ana Carpio de Grenón, Liliana Grenón; trabajadores de la Cooperativa: Fanny Brignone, Emanuel Pana y Tatiana Cadario.
El Intendente Horacio Rubiolo y , como representante legal de la Cooperativa y representando al Consejo Deliberante de Piquillín, el Dr. Omar Chialva, también fueron parte. También estuvieron algunos amigos: Ernesto Enrico, Valentín Torres, Verónica Torres y Antonio Mastroianni.
Durante el agasajo se recordó su recorrido en las distintas funciones que ocupó en el Consejo de administración y después cada uno de los presentes expresó su sentir y recuerdos que don Miguel les dejó. Todos destacaron la buena persona que era, su afán de colaboración y sus garras por defender siempre su localidad querida: Piquillín.
El evento tenía por objetivo nombrar dicha oficina con el nombre de “Miguel Isaac Grenón” como homenaje a su recorrido.
Durante el acto se presentó un retrato con una placa donde se leía: «Salón:MIGUEL ISAAC GRENÓN; Consejero del Consejo de Administración, Reconocimiento a su trayectoria, a sus aportes, a su buena voluntad, a su tiempo, a sus ganas de mejorar la institución».
Además se recalcó la persona de valores que don Miguel era por su honradez, sinceridad, calidez y demás características que confirmaban que su foto colgada en la pared significaba mucho como ejemplo para todos y aún más para las nuevas generaciones que se vienen formando.
Su esposa, la señora Ana Carpio recibió cada palabra con emoción, orgullo y agradecimiento por cada relato y recuerdo compartidos.






