«Si Dios me diera la oportunidad de volver a nacer, haría lo mismo que hice desde que `la Norma´ me parió»

El Chino Luna confirmó su retiro del fútbol y habla de su nueva vida. Dice que no extraña la práctica profesional y que se prepara para ejercer la política dirigencial.

Su lugar en el mundo es Piquillín, siempre lo dice, y lo repite hasta el cansancio. Pero su lugar en el mundo futbolístico sin dudas fue Tigre. Si, fue…porque el «Chino» Luna anunció que ya no jugará más al fútbol de manera profesional.

En realidad a su retiro lo mencionó en una entrevista que le realizó el periodista Diego Borinsky para La Nación. Fiel a su estilo humilde, no convocó a una conferencia de prensa, ni hizo un comunicado por las redes sociales. Simplemente un día dejó de jugar, y ya.

-Tuvimos que enterarnos de tu retiro definitivo mediante una respuesta que diste en una entrevista…

Si, pasa que no creí necesario hacer un anuncio oficial. Mi gente más cercana sabía que esa etapa ya había pasado, lo entendieron, me apoyaron y es todo lo que necesito.

-¿Entonces es verdad, ya sos un ex jugador de fútbol?

Y…uno se va a sentir futbolista toda la vida supongo, pero sí, ya no soy un jugador profesional.

-¿Como fue que tomaste la decisión de retirarte?

Lo venía procesando desde antes. Quise ayudar a Tigre a volver rápido a Primera, que es donde tiene que estar, pero no se dio. Mi último partido en el club tras perder la oportunidad de ascender fue un momento bisagra, me fui al pueblo y me di cuenta que no quería volver a jugar a la pelota. Siempre que estoy en Piquillín, me cuesta horrores volver a Buenos Aires, pero esta vez las ganas de quedarme y de dejar de entrenarme eran muy fuertes.

-Entonces, simplemente dejaste de ir a entrenar…

No. Yo fui al club de todas maneras, porque tenía ese compromiso, pero viajé con un dolor en el pecho y realmente no tenía ganas de ir. Entonces hablé con el técnico, él me dijo que pretendía de mi para la nueva temporada y yo le dije que para mí se había acabado, que ya no tenía más para darle al equipo.

El título de la Copa de la Superliga fue quizás la mayor alegría que vivió en Tigre.

Un penal errado ante San Martín de San Juan fue lo último que se vio de Luna en Tigre, y mas allá de ese trago amargo, los hinchas del equipo de Victoria tienen muchos buenos recuerdos de su ídolo.

El Chino fue la gran figura del ascenso a la B Nacional en la temporada 2004-2005 en la cual fue el goleador del equipo y del torneo.

Con el delantero cordobés entre sus filas, Tigre peleó varias veces el torneo de Primera División, las más recordadas son el triangular final contra San Lorenzo y Boca por el Apertura 2008, en el que se terminó imponiendo el conjunto xeneize (estuvo a un gol de ser el campeón); y aquel campeonato de 2012 en el que el conjunto de Victoria arrancó muy complicado con el descenso, y casi termina coronándose tras llegar a la última fecha puntero junto a Arsenal, que terminaría siendo el campeón.

En ese torneo de la salvación milagrosa tras descontarle 40 puntos a Banfield, Luna fue el máximo artillero del campeonato. Además, el Chino es segundo máximo goleador de la historia del club, a tres goles de Juan Marvezy (116).

Y la frutilla del postre, fue sin dudas el título de la Copa de la Superliga 2019, lograda en el Estadio Kempes venciendo a Boca Juniors en la final.

-¿Te quedó algún sueño por cumplir en el fútbol?

Jugar en la selección quizás. Me arrepiento de no habérmelo propuesto, ya que siempre creí que había mejores. Mi error fue no imaginarme en ese lugar y trabajar para lograrlo. Sé que cuando Maradona armaba la selección local, estuve en consideración.

-¿Y ser el máximo goleador de Tigre…?

Sí, también. Cuando me acuerdo que quede a solo tres goles de lograrlo me da un poco de bronca. Quizás si hubiera continuado un torneo mas lo lograba. Pero bueno, ya está.

-¿Como estas llevando tu vida tras el retiro?

La verdad es que bien, no extraño nada. Pensé que me iba a costar más dejar ese día a día de ir a entrenarme, de compartir un vestuario…¡fueron 20 años! Pero me adapté rápido, hago mucho deporte por mi cuenta, practico boxeo, juego cuando puedo con mis nenes a la pelota, y no extraño competir profesionalmente. A eso le tenia miedo, por lo que me habían contado ex compañeros sobre sus experiencias. Yo por suerte pude adaptarme rápido a mi nueva vida.

-¿El hincha de Tigre te pide que reveas tu situación?

Si, cada vez que pueden me preguntan porque no sigo. Ademas todo el tiempo me están demostrando su cariño hacia mi y hacia mi familia, ya que somos sus vecinos. Pero también respetan mi decisión y saben que desde otro lugar, siempre voy a estar para el club.

-Contame sobre tu «nueva vida».

Asesoro a una empresa de representantes, y voy a recorrer el país, viendo jugadores. Vamos a hacer pruebas a chicos de diferentes lugares, y en la zona ya hay algo hablado para hacer en Río Primero. En cuanto al club, estoy de a poco involucrándome en la política dirigencial, quiero ayudar a la entidad en todo lo que pueda y de paso sumar experiencia en gestionar.

-En la misma entrevista en la que comunicaste tu retiro, también se destaca algo que nunca habías hecho: mencionar tu idea política…

Si, bueno, para quiénes me conocen, no dije nada que no sepan. Mis ideas coinciden con las del peronismo. Igual hoy está todo tan revuelto, que hay que ver bien en que espacio político encuadrarse.

-¿Vas a dedicarte a la política partidaria?

La política me apasiona cada día mas y me asesoro todo el tiempo sobre el tema. Para estas elecciones recibí propuestas de casi todos los partidos políticos acá en Buenos Aires. Pero por el momento decidí no sumarme a ninguna idea. Pero en el futuro, probablemente comience a incursionar en la política.

-¿Vas a involucrarte activamente en la política de Piquillín?

Por el momento voy a colaborar en lo que pueda desde acá. En algún momento me gustaría volver a vivir en el pueblo y hacer muchas cosas, ya que considero que falta algo de justicia social en sus acciones. Pero la verdad es que acá mis hijos tienen su vida, sus afectos, y Cintia (su esposa) está desarrollando muy bien su profesión. Además, para mis actividades es mas beneficioso seguir residiendo en San Fernando. A futuro sí, es probable que acerque una propuesta beneficiosa para los vecinos de mi pueblo.

Tras 20 años y más de 160 goles, producto de sus pasos por Deportivo Español, (donde debutó), Tigre (cuatro etapas), Racing de Avellaneda, Quilmes, Elche (España), Liga de Quito (Ecuador), River Plate y Rosario Central, los vecinos de Piquillín, quienes siguieron toda su carrera, deberán también acostumbrarse a la idea de que ya no gritarán nuevos goles del «Chino» Luna.

«Siempre creí que iba a dejar antes de los 35, y tuve un hermoso tiempo extra, alargando mi carrera hasta los 39 años. Estoy agradecido y orgulloso de haberlo logrado por mí y por los que me quieren», reflexiona.

-¿Te arrepentís de alguna decisión que hayas tomado durante tu carrera?

Sobre mi carrera hay decisiones que quizás no fueron las mejores, pero me quedo con lo que pude hacer con mi vida personal. Y ahí si te digo que volvería a hacer lo mismo que hice para llegar a este presente. Tengo un tatuaje de La Mona al que le adapté un mensaje de una canción de él que dice «Si Dios me diera la oportunidad de volver a nacer, haría lo mismo que hice desde que `la Norma´me parió». Y lo siento así realmente. Agradezco mucho a mi mamá y a la buena gente que me rodeó, porque me ayudaron a adquirir fortaleza y convicciones para tomar buenas decisiones en cada momento de mi vida. Hoy tengo mucho más de lo que pude imaginar, y no hablo de lo material.

El tatuaje que le dedicó a sus ídolos: su mamá Norma y la Mona Jiménez.

«Carlitos», como era llamado en Piquillín antes de convertirse en el «Chino Luna» ya no será futbolista. Pero, «El Nuevo Luna» se está gestando y ha comenzado a transitar una nueva etapa, en la que no se olvida de sus vecinos del pueblo.