La combinación de música en vivo, arte local, la variada oferta gastronómica y el compromiso con la inclusión, hicieron de este evento una experiencia inolvidable, consolidándolo como uno de los más importantes de la región.
El Festival de Piquillín 2024, que se celebró el pasado sábado por la noche, se consolidó como uno de los eventos más destacados de la región, reuniendo a una multitud que disfrutó de una jornada llena de música, arte, gastronomía y cultura.
Uno de los momentos más emotivos de la noche fue cuando el Taller Municipal de Lengua de Señas interpretó el himno nacional, conmoviendo a todos los presentes con este acto de inclusión, respeto y solidaridad.
Además de la música, que tuvo su epicentro en el escenario principal, el festival contó con una variada oferta de stands de artesanos y emprendedores locales y regionales, quienes presentaron sus productos y creaciones, dándole un toque único y auténtico a la jornada. Los asistentes también pudieron disfrutar de una amplia oferta gastronómica, con food trucks que ofrecieron una variedad de opciones deliciosas y de primer nivel.
El escenario del festival recibió a diversos artistas locales que brillaron con sus presentaciones, entre ellos Uriel Villalba, Diamela y Agostina y el Taller de Folclore, quienes aportaron una gran dosis de tradición y talento. La apertura estuvo a cargo de Alberto Bustamante y Las Voces de Piquillín, quienes dieron el puntapié inicial con un show espectacular.






La noche continuó con las potentes presentaciones de La Trampa, cuya energía en el escenario desbordó al público, Perro Negro matizando la noche con su rock y el grupo Entrevero, cada vez más consagrado, hizo vibrar – y bailar- al público.
El escenario del festival fue también el espacio para la impresionante presentación de Femme VSR, un prestigioso grupo de danza que dio un toque único al evento.
Un momento estelar fue la actuación de Hugo Dante, el conocido cuartetero que hizo cantar y bailar a todos, y el impresionante cierre de Magui Olave, cuya voz y carisma conquistaron al público hasta bien entrada la madrugada.
El Festival se destacó por su ambiente festivo y familiar, con actividades para todos los gustos. La combinación de música en vivo, arte local, la variada oferta gastronómica y el compromiso con la inclusión hicieron de este evento una experiencia inolvidable.



