El director del Dispensario se mostró conforme con la remodelación y ampliación del edificio. Además, el médico subrayó la importancia de la digitalización del turnero y de las historias clínicas.
El Dr. Ariel Cattaneo, Director del Centro de Salud de Piquillín, estuvo presente en la inauguración de la remodelación y ampliación del edificio, destacando las mejoras realizadas por el municipio en el nosocomio.
«Estoy muy contento porque esto ayuda a mejorar la atención con una sala de shock room separada de la enfermería, para una mejor atención del paciente crítico», destacó el médico, quien también subrayó la importancia del turnero digital, que facilitará la agilización de la atención médica.
El director mencionó como un logro significativo la sistematización de las historias clínicas: «Antes tardábamos mucho tiempo para tener datos fidedignos a la hora de conocer una problemática». «Ahora, con la sistematización tenemos informes rápidos y precisos, estadísticas a las cuales acudir para ayudar a la población y tener una mejor calidad de atención», añadió.
Sobre cómo se sintió en estos nueve meses al frente del dispensario, Cattaneo expresó: «Gracias a Dios tengo el apoyo del intendente y el personal de salud es muy amigable. Es muy cómodo trabajar con ellos. Tengo la posibilidad de que lo que estoy pidiendo y lo que el Centro de Salud necesita, el intendente está colaborando muchísimo para que pueda llevarse a cabo. La verdad es que uno puede tener propuestas, pero sin apoyo es muy difícil llevarlas adelante».
Consultado sobre la nueva estética del edificio, el profesional fue elogioso: «Quedó divino, mas de lo que esperaba. Es un cambio enorme, más moderno. No es feliz venir al centro de salud, pero ahora uno se siente mucho más cómodo. La verdad es que muy lindo ha quedado».